De acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2021 (ENIF) elaborada por de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el Inegi, en México hay alrededor de 100 millones de cuentas bancarias y sólo el 2% de la población tiene una cuenta de inversión y depósitos a plazo.
Este dato dejar ver lo expuesto que está el ahorro de los mexicanos a recibir bajos o nulos rendimientos. Quienes depositan su dinero en una cuenta bancaria obtienen una tasa anual bruta promedio del 1.5% en los depósitos de exigibilidad inmediata, y de 5.10% en los depósitos a plazo (información a marzo de 2022). Casi siempre las opciones bancarias tradicionales ofrecen reales rendimientos negativos (por debajo de la inflación) por lo que los ahorradores sufren la pérdida del poder adquisitivo de su capital.
Alrededor de la idea de invertir en la Bolsa de Valores persisten una serie de mitos. Por ejemplo, que solo pueden invertir las personas que tienen mucho dinero, que colocar el dinero ahí es como hacer una apuesta en la que se puede perder toda la inversión, o que tienes que ser muy pro (como dicen los centennials) en el conocimiento de los instrumentos y los mercados financieros. En realidad, el mercado de valores tiene opciones para el pequeño, mediano y gran inversionista, así como para inversionistas principiantes y experimentados que demandan instrumentos más sofisticados.
Dentro de todos los males que el Covid-19 trajo a los hogares en materia económica, algo bueno dejó y es que a la mayoría de las personas les cayó el veinte de lo importante que es ahorrar, pero también invertir y buscar incrementar su dinero y, en ese sentido, el mercado de valores supera sustancialmente a las opciones más tradicionales como las cuentas bancarias. Según la CNBV, en diciembre de 2019 las Casas de Bolsa administraban los recursos de 299,582 cuentas de inversión y en noviembre de 2021 ya eran 2,810,568.
Además de la pandemia, otros factores que detonaron el crecimiento exponencial de las cuentas de inversión enfocadas al mercado de valores están las wallets (billeteras virtuales), las aplicaciones, y las plataformas digitales de inversión que permiten la rápida apertura de cuentas con montos muy accesibles.
Antes que nada, es importante que tengas presente que en el mercado de valores debes invertir de acuerdo con tus características (perfil de inversionista o nivel de tolerancia al riesgo), necesidades y metas (plazo).
Además de las volátiles acciones, puedes invertir en instrumentos de deuda o renta fija emitidos por gobiernos, empresas e instituciones financieras para financiar sus proyectos, los inversionistas los compran (les prestan sus ahorros) a cambio de un rendimiento o tasa de interés pagada periódicamente o a su vencimiento. Los hay de corto, mediano y largo plazo, así como con distintos niveles de riesgo crediticio y de mercado reflejados en una calificación.
El riesgo crediticio se refiere a la capacidad de pago del emisor y se denota con letras: la mejor o más alta es AAA, y B la más baja. El riesgo de mercado se señala con número, 1 es el de menor riesgo y 7 el más elevado, y va muy de la mano con el plazo del instrumento por la volatilidad que, en el tiempo, puedan presentar las tasas de interés. Entre mayor sea uno de estos riesgos, o ambos, mayor será el rendimiento que deberá ofrecer el emisor para que los inversionistas se animen a prestarles su dinero.
Los instrumentos de deuda proporcionan rendimientos a los inversionistas en forma de pagos regulares de intereses y les reembolsan el principal cuando alcanzan el vencimiento.
Opciones para invertir en deuda
– En directo
Se requiere abrir un contrato de inversión con un banco o casa de bolsa, y tener cierto nivel de conocimiento de los instrumentos y del comportamiento del mercado. Los montos que solicitan pueden ser accesibles o muy altos.
Puedes elegir invertir en:
A) Instrumentos gubernamentales como cetes a plazos de 1, 3 y 6 meses y hasta un año; bonos en plazos de 3 y hasta 30 años con pago de tasa de interés fija semestral; bondes a 5 años con pago de tasa variable cada 28 días; bondes F a plazos de 1 a 5 años y pago de intereses cada mes o 28 días; udibonos, emitidos en unidades de inversión (UDI’s) con tasa de interés fija cada 6 meses más una ganancia o pérdida indexada a la inflación.
B) Privados, emitidos por bancos y empresas e instrumentos como cedes, papel comercial, pagarés con rendimiento liquidable al vencimiento, obligaciones, certificados de participación inmobiliaria, etcétera.
Al invertir directamente en instrumentos de deuda puedes quedarse con ellos hasta su vencimiento y recibir el pago de intereses periódicos y el principal al final, o venderlos anticipadamente y asumir el riesgo de mercado pues si al vender tus títulos la tasa de interés está más elevada que en el momento de la compra incurrirás en una pérdida, y es que al invertir en instrumentos de deuda compras precios y que éste va en relación inversa al nivel de las tasas de interés.
– Programa CetesDirecto
Es una plataforma digital promovida por Hacienda para invertir de manera directa (como lo descrito en el anterior inciso) pero sólo en instrumentos gubernamentales con montos de inversión muy accesibles.
– Fondos de inversión de renta fija
Bancos, Casas de Bolsa, Administradoras y Distribuidoras de fondos (Skandia es una de ellas) ofrecen a sus clientes una cartera de fondos de inversión (instrumentos que aglutinan las aportaciones de varias personas para invertir sus ahorros en instrumentos bursátiles como acciones y títulos de deuda). Los hay con horizonte de inversión de corto, mediano y largo plazo, y emitidos por gobiernos y corporaciones con distintos niveles de riesgo crediticio y de mercado, etcétera.
– Fondos de inversión cotizados en la bolsa (ETFs) de deuda
Son fondos de inversión que se pueden comprar y vender en la Bolsa de Valores tal como sucede con las acciones.
– Portafolios de inversión hechos a la medida
Al acudir a una institución financiera puedes armar un portafolio de inversión, echo a la medida, con instrumentos y fondos de deuda enfocados en alcanzar tus metas financieras.
– Planes de ahorro para el retiro (Afores y PPRs)
Millones de mexicanos invierten en el mercado de valores a través de su cuenta individual de la Afore o través de un Plan Personal de Retiro, y éstos al tener un horizonte de largo plazo optan por incluir en sus portafolios de inversión un elevado porcentaje de instrumentos de deuda de mediano y largo plazo para restar riesgo y agregar rentabilidad a sus portafolios de inversión, aunque por sus características, tiende a ser moderada.
En resumen, antes de invertir en la Bolsa, específicamente en instrumentos de deuda, checa distintas opciones, establece tu objetivo de inversión y el plazo e identifica el nivel de riesgo que estás dispuesto a asumir. Los instrumentos de deuda son la mejor manera de contrarrestar el efecto de la volatilidad en tus inversiones cuando se realiza una elección cuidadosa.
Apóyate en tu asesor y trabaja en incrementar tus competencias financieras.
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