Las olas de calor son fenómenos naturales que ocurren cada año, sin embargo, debido al cambio climático y a la actividad de los seres humanos en los diferentes entornos, estas olas se han intensificado a tal grado que han llegado a afectar a diversos sectores de la población.
Las intensas temperaturas han generado cortes de energía eléctrica en diversos estados del país, debido al aumento en su consumo para el aire acondicionado, ventiladores y refrigeradores para ayudar a soportar el calor.
A raíz de estos apagones es que los costos de comercios y servicios en el país han aumentado hasta un 30% y uno de los sectores más afectados fue la industria manufacturera, pues por cada hora sin energía eléctrica se calculan pérdidas por $200 millones de dólares, según informa el Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera.
Pues estar sin un minuto de electricidad pueden perder horas de trabajo debido a que deben empezar desde cero la producción, además, la inestabilidad del sistema eléctrico puede ahuyentar la inversión a este sector.
De acuerdo con el Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, al registrarse un aumento de la temperatura de incluso el 1%, se reduce entre el -0.70% y el -1.70% del crecimiento económico a nivel nacional y esto representa alrededor de 500 millones de pesos.
Se prevé que para el año 2100 las altas temperaturas serían la causa principal de la reducción del PIB per cápita del país, entre el -1.9% y – 2%, significa alrededor de 750 millones de pesos.
En general, los sectores que se han visto más afectados por las olas de calor son los sectores agrícolas, debido a las grandes temporadas de sequías acompañadas de temperaturas de hasta 45°, lo que genera una afectación tanto del entorno, como de los trabajadores, de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) el calor ya representa un riesgo para la salud de un trabajador, pues al laborar en un entorno que rebase los 35° ya ocasiona que su rendimiento baje a solo el 50% a causa del agotamiento.
Así como ha perjudicado a los trabajadores, también el entorno y los recursos varían durante las olas de calor, por ejemplo, debido a las sequías y a los cambios bruscos de clima los cultivos se han visto afectados y no alcanzan a cubrir la demanda.
La pérdida de cosechas que se estima en al menos 50 millones de pesos, un 0.16% del PIB, ocasiona que los precios se disparen en varios insumos, como lo son las frutas y verduras, incrementando así sus precios por encima del 20% y en los establecimientos donde se venden estos insumos los precios se elevan, afectando la economía de los consumidores y alentando el mercado.
¿Cuáles son los productos más afectados por la ola?
Durante el mes de abril de 2024, la inflación general afectó el precio de varios productos de la canasta básica, pues tan sólo en frutas y verduras se registró un aumento considerable, los productos que tuvieron un mayor incremento en su precio debido a la inflación, según datos del Instituto Nacional de Protección al Consumidor fueron:
*Datos obtenidos durante la primera quincena del mes de mayo, 2024
También ocurrió con las bebidas como el refresco, sólo durante el mes de abril la inflación de los refrescos aumentó alrededor de 6.50% anual, a diferencia del mes de marzo que se mantenía en 6.30%, mientras que el agua embotellada redujo la inflación de 6.0% hasta llegar a 5.7% durante los meses de marzo y abril, según el INEGI.
Otros productos que son necesarios ante la ola de calor son los bloqueadores solares, pues estos han sido los más beneficiados y solicitados por la población, pues este año se situó como el producto con mayor crecimiento alcanzado un 15%.
Entre 2013 y 2023 la demanda de bloqueadores aumentó más del 325% al pasar de 23.5 millones de dólares a más de 100 millones de dólares en el país, incrementando su demanda en 32% anualmente y se prevé que siga teniendo un crecimiento de al menos el 10% anual hasta alcanzar los 160 millones de dólares en 2028.
El uso de aires acondicionados son sin duda la opción más costosa para combatir el calor, de acuerdo con el INEGI, en 2023 se estimó que hay alrededor de 7 millones de equipos de aire acondicionado en México, de acuerdo con la CFE.
Al utilizar este artefacto (de una tonelada con capacidad de 1800 watts) por 7 horas al día, puede estimarse un costo de $3 mil pesos bimestrales y $18 mil anuales.
En 2024 se tienen previstas cinco olas de calor en México, las cuales afectarán más a unos estados de la república que a otros, entre los que se registrarán temperaturas más altas (Entre 40° y 45°) están:
Para los pequeños negocios la falta de energía y el aumento de las temperaturas también significa un gran reto, debido a que los productos perecederos corren el riesgo de convertirse en merma, de igual forma, la comercialización de hielo, helados y productos fríos puede bajar debido a los constantes apagones que hará imposible mantenerlos en buenas condiciones, causando desabasto e incrementando sus costos en hasta 30%.
En un futuro, las afectaciones podrían ser mayores, pues de acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el aumento en las temperaturas también podría reducir el rendimiento, empeorar la salud y tener menor productividad, lo que influiría en las decisiones de inversión de las empresas.
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